¡¡¡Hola
a todos/as!!!
Del
martes al jueves fuimos de viaje a Málaga y lo pasamos genial.
Hasta
el aeropuerto de Santander nos llevó Emilio, el voluntario de la Cruz Roja de
Santander, que ya consideramos como uno más del grupo. Allí, nos reunimos con
Eva, una amiga de Laura que nos acompañó durante el viaje.
Tuvimos
muy buen vuelo y aunque nos dio un poco de impresión al despegar y aterrizar, nos
gustó mucho la experiencia.
Una
vez instalados, fuimos a dar un paseo y llegamos hasta el centro, donde paseamos
la Calle Larios y la plaza de la Constitución. Acababa de ser el Festival de Cine
de Málaga, así que pudimos sacarnos fotos en la alfombra roja.
Después, volvimos al albergue, cenamos, estuvimos un rato de charla y nos fuimos a descansar.
Al
día siguiente, nos levantamos con ganas de caminar y conocer bien Málaga. Así que salimos pronto del albergue.
Primero, fuimos a ver el Museo Picasso Málaga. Más tarde, nos dirigimos a la plaza
del Obispo y el Palacio Episcopal (frente a la Catedral), donde habíamos quedado
para empezar un Free tour por algunos de los lugares más emblemáticos de
Málaga.
Nuestro
guía, Enrique, era muy "salao" y nos explicó un montón de cosas interesantes
sobre la historia de la ciudad de Málaga, que es una de las ciudades más
antiguas de Europa y por la que han pasado fenicios, romanos, árabes, etc. hasta su
Reconquista por parte de los Reyes Católicos.
También nos enseñó la Catedral, que es preciosa y le llaman “La Manquita” porque le falta una torre; la calle Larios; la plaza de la Constitución; el Pasaje Chinitas; la Cofradía de los Estudiantes, que tenía unos tronos enormes y preciosos que los cofrades sacan por las calles de Málaga durante la Semana Santa; el Teatro Romano y el exterior de la Alcazaba, ¡desde donde pudimos ver la casa de Antonio Banderas!.
También nos enseñó la Catedral, que es preciosa y le llaman “La Manquita” porque le falta una torre; la calle Larios; la plaza de la Constitución; el Pasaje Chinitas; la Cofradía de los Estudiantes, que tenía unos tronos enormes y preciosos que los cofrades sacan por las calles de Málaga durante la Semana Santa; el Teatro Romano y el exterior de la Alcazaba, ¡desde donde pudimos ver la casa de Antonio Banderas!.
Y la plaza de la Merced y su obelisco, donde
finalizamos el tour.
Después,
fuimos a comer un restaurante de comida típica malagueña, que estaba buenísima.
Por
la tarde, volvimos a quedar con el guía que nos enseñó el interior de la Alcazaba, que es muy bonita y tiene unas vistas impresionantes.
Al terminar la visita guiada, fuimos a dar un paseo por el Muelle Uno.
Y más
tarde, volvimos a pasear por las calles cercanas a la Catedral donde
compramos souvenirs. Anduvimos
bastante, así que volvimos al albergue para cenar y descansar.
El
último día en Málaga fue muy breve, así que salimos a dar un paseo por el Barrio de Carranque, donde estaba situado nuestro albergue y
llegamos hasta el Centro Comercial Larios. Cuando volvimos ya estaban los
voluntarios de la Cruz Roja para llevarnos al aeropuerto, donde cogimos el
avión para volver a Santander.
El viaje de vuelta también transcurrió tranquilo y volvimos muy contentos.
Aunque breve, nuestra estancia en Málaga fue intensa y el miedo al avión lo tenemos superado. Así que ya tenemos ganas de hacer otro viaje un poco más largo.
Aunque breve, nuestra estancia en Málaga fue intensa y el miedo al avión lo tenemos superado. Así que ya tenemos ganas de hacer otro viaje un poco más largo.
Estas vacaciones resultaron fabulosas, formamos un grupo majísimo y he visto que tanto Laura como Ángela trabajan duro para ofrecernos lo mejor a todos nosotros.
ResponderEliminarMálaga resultó una ciudad muy bella, Enrique, el guía, que nos la enseñó era muy ameno y profesional. Hemos pasado unos días muy bonitos. Desde luego que repetiría la experiencia porque estuvo genial!